“En un lugar de la Mancha, de cuyo nombre no quiero acordarme….” así empiezan las primeras páginas de El Quijote, y así inicio esta post de mi primera visita a Castilla La Mancha, te contaré qué ver en Consuegra, un paseo recomendado cerca de Madrid.
Todos conocemos la historia de Don Quijote y el fiel Sancho Panza, pero pocos han visitado los famosos molinos que el ingenioso hidalgo confundió con gigantes y contra los que luchó vigorosamente.
¿Dónde se encuentra?
Consuegra es un pueblo ubicado a unos 140 kilómetros de Madrid, en la provincia de Toledo, y en el que podemos encontrar uno de los conjuntos de molinos de viento mejor conservados en la Mancha.
Llegar te tomará aproximadamente una hora y media en coche, lo que lo convierte en un perfecto paseo de un día cerca de Madrid.
Antes de llegar a Consuegra se pueden divisar los 12 molinos en lo alto del Cerro Calderico; datan del siglo XVI y son verdaderamente impresionantes.
Cinco de ellos conservan su maquinaria. ¿Sus nombres? Todos sacados de El Quijote: Sancho, Rucio, Bolero, Espartero y Mochilas.
¿Qué ver en Consuegra?
Lo más emblemático que ver en Consuegra son sus molinos, los que tienen nombres quijotescos.
Bolero funciona como Oficina de Turismo y a su vez como museo. Por 1.5 € puedes adentrarte en esta construcción, descubrir todos los secretos de la molienda del siglo XVI.
Los molinos te darán la oportunidad de conocer un poco más sobre la vida en el Toledo de la época.
También se puede visitar el molino Rucio que está controlado por una empresa privada que lo acondicionó para la visita del público.
¿Qué más se puede ver en Consuegra?
Junto a los molinos está el castillo de Consuegra, una fortaleza del siglo X que ha sido testigo de distintas batallas, romances y traiciones de la historia de España.
Lo más interesante es la fortaleza como tal, ya que la mayoría de los muebles que exhiben son reconstrucciones. Tiene unas vistas increíbles y completa una mañana de historia. Te puedes trasladar a algún episodio de Game of Thrones recorriendo sus pasillos de piedra.
¿Dónde comer?
Completamos nuestra visita con una comida en El Alfar, un restaurante de comida típica castellana en el que pudimos probar diversos platos de la región y pasar un rato muy ameno.
Lo recomiendo ampliamente, en especial los postres (mi debilidad). Es el perfecto cierre para tu visita a las Tierras del Quijote.
Consuegra resultó ser un pueblito muy pintoresco, lleno de historia, magia y rincones bonitos para ver.
¿Sabías que existía?
Tip: Si eres fan de La Casa de Papel, puede que recuerdes este paisaje con molinos de la cuarta temporada, por aquí pasaron valientemente Marsella y El Profesor de camino a Madrid
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